Con 3.4 billones de correos electrónicos diarios siendo blanco de ataques de phishing, ¿cómo puede tu empresa protegerse y evitar convertirse en la próxima víctima de las acciones maliciosas de ciberdelincuentes?
¿Imagina la angustia de descubrir que la cuenta bancaria de tu empresa ha sido saqueada, la información confidencial de tus clientes está a la venta o que tu producción se detiene por completo debido al cifrado de tu inventario?